Por otra parte
quería empezar la temporada con una carrera exigente, aunque a
principio de año mi objetivo era hacer al menos nueve medias, al
final, me he quedado en seis, que tampoco está mal, ya que para el
año que viene, posiblemente me quede en la mitad, unas tres.
Octubre suele ser
un buen mes para las carreras, pero este año parece que las
temperaturas todavía no han sido las deseables, ya descartado el día
dos por boda la noche anterior, me cogía el domingo 9. No había
estado nunca en Cártama, y si la media contiene cuestas mejor.
Cuatro compañeros
compartíriamos la carrera, dos de Axarlón y dos de Atletismo Vélez,
tras la recogida del dorsal y con tiempo de sobra empezamos el
calentamiento.
La hora prevista era a las 9:30. Esta vez sí
compartiría carrera con Super Paco y también vería a corredor
errante. Un accidente en la carretera por la que correríamos nos
retraso un hora la salida, esto conllevó que la temperatura hiciera
una carrera más exigente.
Conocía el perfil,
los primeros 5 o 6 kilómetros se acumularía el 90% del desnivel,
casi 140 metros acumulados, así rodé lentamente y sin prisas,
queria reservarme, la semana anterior no había sido muy buena,
varias molestias en las articulaciones y un cansancio acumulado no me
vaticinaba un buen día.
Estrategia
planteada y puesta en marcha empezaba a dar resultados una vez
cumplido los primeros 6 kilómetros, la primera cuesta abajo me
lanzaba a 4:50, y ya en llano, rondando los 5:10, así hasta el
kilómetro 11, ahí si empezaba a encontrarme agusto, ya me había
despedido de mis compañeros de los primeros 10k y empezaba
lentamente a recoger corredores, suele pasar. Algunos con muy mala
cara.
Me había comido al
menos cuatro orejones de melocotón, y en el kilómetro 16 el resto.
Mucha calor, pero empezaba la cuenta atrás, y me veía con buenas
sensaciones, sin rapidez, pero en forma. Así aceleré un poco más y
mucho más a partir del kilómetro 18, para darlo todo hasta que las
fuerzas empezaron al flaquearme a penas con 600 metros, que fue
cuando me adelantó un corredor, podría haberle dado caña e ir a su
captura, pero sé que ese esfuerzo lo pagaría, ya me había vaciado
lo bastante y el mes de octubre estaba empezando.
1:52:11 así
quedaría el marcador oficial. Casi minuto y medio menos que en
Torremolinos, así quedaría mi mejor marca personal del 2016. Es
bueno quedarse con la sensación de que podría haberla bajado. Sí,
pero ¿vale la pena? Todavía mis pulsaciones no son las idóneas,
unos 170 de media, eso significa que podría haber aumentado el
esfuerzo y aguantar por encima de las 176 pulsaciones, pero no es mi
objetivo, es lo contrario: bajarlas.
Llegada a meta y
recogida de la bolsa del corredor (camiseta 42k manga larga (ya era
hora una camiseta de m/l, me viene muy bien para mis entrenos), dos
botes de 0,5l de puchero aneto, botellín de agua, isotónico en
meta, y no sé si alguna cosilla más. Tampoco vamos a pedir mas por
el precio.
5 minutos de
descanso y breves estiramientos, y reencuentro con los compañeros,
fotos de rigor, tapita y caña de rigor en el bar de turno y vuelta
al pueblo.
Dos días después
tirada a 130 pulsaciones, un rompepiernas de 16k al trote por caminos
irregulares y carriles diversos, un entrenamiento que me ha venido
muy bien. Tres días después mientras escribo, sin apenas molestías
pero con las piernas muy cansadas, lo normal, el tiempo de
recuperación es el que es. Y este mes de octubre se espera muy
exigente y todavía me queda noviembre.
En unos días haré
una entrada al blog con mas detalle sobre mi filosofía en la
carrera, así que por ahora despacito y buena letra.
En resumen, una
media de Cártama para no repetir, pero no por ello no dejo de
recomendarla. Ideal como tirada larga y para medirse de cara a la
temporada y ver qué tal ha ido los meses de verano. Con tantas
carreras, no queda más remedio que ser más selectivo.
Están saliendo
carreras por todos lados, es el boom, pero al final sólo quedarán
algunas.
Nos vemos en I Desafío Alhama-Maroma 15k el 16/10/2016
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