Este año lo llevo fatal con la
lectura, pero al menos, aunque sea sola una página leo al día. Y no
sé, tal vez porque no acabo de coger el libro que me deje enganchado
hasta leer sin parar.
Después de la magnífica obra de
ciencia ficción: Hyperion que leí recientemente, me puse mano a la
obra con la segunda parte. Y aquí nos encontramos con la culminación
de la primera, dónde se nos enseñaba solo un poquito, de lo que
venía, la conspiración universal, la lucha entre el bien, el mal, los
dioses, las razas, a través del espacio y el tiempo. Tampoco tiene pérdida, la
conversación, toda una perla, entre un ente de la red y uno de los
personajes, mezcla de zen y otras religiones, y otras conversaciones con mezcla de poesía. Si Dios es un poeta, es un poeta frustado. Eterno y
omnipresente y a la vez desconocido Dios.
Así sigue la Caída de Hyperion, ya
los peregrinos llegaron a su destino, ahora sólo les queda
enfrentarse a él.
Se descubren misterios, está en juego el destino
de la raza humana. Y al final cuando se resuelven algunos enigmas,
surgen muchos más y queda la puerta abierta a las siguientes partes,
que algún día caerán. Pero por ahora un descanso.
Curioso la cantidad de portadas, depende de los años de edición, como sacan de diferente estilo, aquí dejo dos.
La Caída de Hyperion es un libro
recomendado que no debes perderte si leíste Hyperion.
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