Periostitis y Tendinitis fascia lata mas tirando para cintilla. Sobreviviré...
El mes de enero ha
sido una de cal y otra de arena. Muy ilusionado por la segunda
quincena, con un avance espectacular en los entrenamientos de 10k, 1
hora y 7 minutos y a los dos días otra de 1 hora y 4 minutos. Mi
record en los 10k, con un objetivo de terminar en la carrera de el
corte ingles, allá por octubre si no me equivoco en 1 hora, con lo
cual me daría por satisfecho y si no también.
106 kms con
runtastic y varios más con Caledos Runner, pero de andar rápido,
más para sumar algo por lo de Iwopi y todo eso que ya os contaré.
Todo esto sumado a otro espectacular record de 15k en 1 hora y 38
min. Que me hizo empezar a darle vueltas a la cabeza, creyendo que
podría terminar la media maratón de Vélez, próxima en Abril, en
al menos 2:20 – 2:30 como máximo, llegando eso sí, siempre, sin
sufrir, al meno no mucho. Con lo cual iria sobrado de marcador, por
eso de que lo van cerrando por tiempos, con ventaja para que no me
pillara el coche que cierra y por desgracia de los últimos, eso sí,
con el objetivo de terminar aunque sea el último, pero terminar.
Sería para mi todo un acontecimiento que seguramente en breve
olvidaría para buscar nuevos objetivos y nuevos límites. Hasta ahí
todo bien.
Antes de apuntarme
quería machacar esa media intentando previamente cerrar enero con
esas dos horas 30 minutos y ver como había mejorado mi marca de 2
horas y 38 minutos.
Así empecé la jornada con muy buenas
intenciones pero... Nada más empezar ya noté las pulsaciones más
altas de lo normal, primer aviso, casi a 170 ppm, más adelante
conseguir controlar y bajar a 165. Pero con picos a 174 ppm. Y aunque
me dirigí a correr unos kms por la playa, esa noche notaba un
cansancio de más, el cuerpo me estaba avisando que el mes de enero
había sido bueno pero que no me pasara, por otra parte yo quería
correr con esa sensación de malestar y probar que tal sería una
carrera con esas sensaciones. Los primeros pinchazos en la parte
lateral de la rodilla comenzaron en el km 10 muy leves y esporádicos
pero molestos. Intentando cambiar la pisada y el ritmo con idea de
adivinar de que podrían venir. Así fue tirando más lento que la
carrera de los 15k anteriores pero con el firme objetivo de bajar de
los 2:30 seguro. Y casi lo consigo, joder. Al subir la cuesta del
hospital ya de vuelta, kilómetro 17,4 paro por el pinchazo y ahí no
pude reanudar, la molestia en el tendón era muy fuerte, todavía me
faltaban esos 3,7 km casi nada porque era lo que me falta para llegar
a mi objetivo. Así que tras parar unos segundos, andar rápido,
masajearme y volver a trotar, nada de nada, más dolor, no me rendí
y tiré andando con la idea loca de llegar en el tiempo, y tampoco.
Frustración, al menos en principio, luego la satisfacción de que si
no fuera por el pinchazo llego con mal cuerpo y no sé si me hubiera
pillado un buen día incluso tal vez bajar de las 2 horas 20 minutos.
Cosa impensable hace solo tres meses. Y es que os recuerdo que empecé
a trotar el 12 de agosto, más o menos, y desde entonces casi no he
parado.
Luego le das
vueltas al coco y piensas que mejor vivir esta experiencia ahora como
novedad, y analizarla con sus consecuencias, al menos una semana de
parón o más, que verla como novedad el día de la carrera dónde
las expectativas son las que son y la gente, quieras o no, ahí está
y uno, bueno, siempre quiere quedar bien.
Lo del dolor al
tocarme en la parte delantera de las piernas ya era algo acostumbrado
que no me molestaba salvo que no me tocara, periostitis. Y lo de la
rodilla, la conocida "rodilla del corredor" o cintilla,
todo una molestía jodida. Pero también un aviso de que debo tomarme
las cosas más tranquilas y tal vez volver al plan principal 5+1.
Empezar agosto 2014 con 5k e ir subiendo 1k cada mes. Así en enero
me hubiera quedando machacando los 10k y pasándome a los 12k y 15 km
y por último a por lo 21,1 km. Y es que mentalmente estoy muy
crecido, pero físicamente tengo que darme más tiempo, mas forma,
resistencia, bajar pulsaciones y aumentar velocidad, acortar
distancias.
Así que traslado el apuntarme o no a final de febrero
viendo como evoluciono en mis próximas visitas al fisio y tal vez una
última prueba de control en febrero. En marzo si quedan plazas
libres creo que todavía estaría a tiempo, pero ya veremos porque
suben la inscripción de 15 euros a 23 euros, una pasada. En fin esto
de correr tampoco tiene que volverse un sacrificio económico que una
cosas son unos eurillos y otro ya es un sablazo.
Por otro lado me
acabo de apuntar a la MLK II de Málaga para el próximo 14 de marzo.
8Kms nocturnos por las calles de Málaga con subida al Gibralfaro
incluido, ya os contaré en esta mi primera carrera del 2015 con
linterna incluida.
Esto tampoco va a ser pa tanto un semanilla y machete. Eso sí a calentar y enfriar más...
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